El origen de las enchiladas suizas se remonta a un restaurante en la Ciudad de México, donde un cliente suizo solía ordenar enchiladas aunque no podía tolerar el picor del platillo del que tanto disfrutaba. Los chefs encontraron una solución brillante: agregar queso derretido para suavizar el picante, resultando en este platillo único y delicioso. Sin duda, añadir leche a la salsa realza la cremosidad, lo que hace que estas enchiladas sean tan cremosas. Aunque en la receta original se hornean, preparar estas enchiladas en un sartén hará que el proceso sea más rápido y sencillo.

Instrucciones

Para la salsa:

1. Prepara los chiles poblanos: Asa los chiles poblanos directamente sobre el fuego hasta que estén completamente negros. Colócalos en una bolsa de plástico durante 10 minutos para que suden. Retira la piel quemada, desvénalos y retira las semillas.
2. Licua los ingredientes: En una licuadora, agrega los chiles poblanos asados, la leche, la crema agria, el caldo de pollo, el ajo, la cebolla, el cilantro, la sal y la pimienta. Licúa hasta obtener una mezcla suave y bien combinada.
3. Cocina la salsa: En un sartén grande, calienta un poco de aceite a fuego medio. Vierte la salsa licuada y cocina durante 10-15 minutos, revolviendo ocasionalmente, hasta que espese ligeramente.

Para las enchiladas:

1. Prepara las tortillas: Calienta un poco de aceite en un sartén a fuego medio. Fríe brevemente las tortillas para suavizarlas, aproximadamente 10 segundos por cada lado. Retira y coloca sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
2. Rellena las tortillas: Rellena cada tortilla con pollo desmenuzado y un poco de cebolla picada. Enrollalas y colocalas en un sartén grande.
3. Añade la salsa: Vierte la salsa de poblano y leche sobre las enchiladas, asegurándote de que queden completamente cubiertas.
4. Añade el queso: Espolvorea el queso rallado sobre las enchiladas.
5. Cocina: Cubre el sartén y cocina a fuego medio-bajo hasta que el queso se derrita y burbujee, aproximadamente 10-15 minutos.

Decora con cilantro fresco y sirve calientes. ¡A disfrutar se ha dicho!