Precalienta el horno a 325°F.

Derrite la mantequilla con la leche entera y 1 cucharada de vainilla en un sartén a fuego medio-bajo, con cuidado de que no se queme. Guardar y dejar enfriar.

Batir los huevos en un tazón grande para mezclar, luego agregar el azúcar hasta que se disuelva. Agrega completamente la mezcla húmeda del paso 1.

En un tazón para mezclar aparte, combina la harina, el polvo de hornear, la canela y la sal. Agrega gradualmente a la masa húmeda.

Engrasa un molde para hornear de 9×13 pulgadas con mantequilla Real California, luego vierte la masa. Hornea por 30 minutos.

Mientras tanto, vierte la leche condensada en una cacerola y deja que hierva suavemente a fuego medio-bajo. Mezcla las fresas, los arándanos y las frambuesas, luego agrega la leche evaporada, la crema espesa y el extracto de vainilla.

Con el mango de una cuchara de madera o algo similar, haz agujeros en el pastel con 1 a 2 pulgadas de distancia. Vierte la mezcla de leche de bayas sobre el pastel, asegurándote de que esté completamente cubierto. Refrigera por 3 horas.

Poco antes de servir, prepara el glaseado: en un tazón, combina la crema espesa, el azúcar y la vainilla con una batidora eléctrica o un batidor hasta que se formen picos rígidos. Extiende el glaseado sobre el pastel, luego cubre con bayas mixtas.